jueves, 1 de mayo de 2014

ALGO OSCURO SE ESCONDE EN LA OSCURIDAD…

Somos seres humanos, seres que albergan en su interior la capacidad de brillar, pero dentro de nosotros habita algo oscuro, esa parte de nosotros egoica y tendente al apego; necesitar algo es ser esclavo de ese algo. No te vas dando cuenta pero la oscuridad escondida, esa que no puedes ver, va creciendo.

Cuando era un joven maratoniano necesitaba correr, necesitaba esa clase de droga diaria, mi mente se volvió rígida y apegada al objeto de su obsesión.

Después de incontables carreras cortas, medias maratones y maratones la oscuridad dentro de la oscuridad emergió, la pude entrever, me di cuenta de dónde estaba, fui consciente y la luz brilló durante el tiempo suficiente para cambiar de rumbo, desapegarme y pasar a otro nivel. Pasé, entonces, al ultrafondo, aquello era otra cosa: resistencia, ritmos cómodos, carrera y marcha en espacios abiertos, conexión con la naturaleza…

Poco a poco, sin darme cuenta, ese algo oscuro dentro de la oscuridad ha ido creciendo, una vez más no me he dado cuenta, pues la oscuridad es muy profunda dentro de la oscuridad. Ahora, después de mi experiencia en mi cuarto Marathon des Sables, me doy cuenta que, una vez más me he apegado, necesitado de aquello que sólo debe ser un complemento, una opción entre otras.
Debí darme cuenta cuando me he oído decir a mí mismo que era un “yonqui del desierto” como todo yonqui, sólo puedes re-encontrarte contigo mismo cuando asumes la realidad, cuando la oscuridad da paso a la luz de la consciencia.

No hay nada malo en desear algo, disfrutarlo, pero la mente siempre quiere más, entonces quiere poseer ese algo, sea un desierto o cualquier otra cosa, entonces, todo se complica y descuadra, se pierde el equilibrio y la oscuridad te acaba envolviendo.

Seguiré amando el desierto que tanto me ha dado cuando nada le pedí… pero de otra forma Otros espacios se abren ante mí. Esa oscuridad los había cegado, aplacado y ninguneado.

Sonrío con la sabiduría del idiota que es consciente de ello.

¿Cómo he podido estar tan ciego?

La respuesta es rotunda: la oscuridad dentro de la oscuridad es total, sólo se puede salir de ella ante el estallido de la luz de la consciencia plena, esa para la que, no siempre, estamos preparados, para la que hemos sido creados.

Ten presente, amigo, que algo oscuro se esconde en la oscuridad, si quieres ver lo que es sólo has de estar despierto, no dormirte, estar atento y consciente y, sólo entonces, quizás, puedas ver lo que la oscuridad alberga en su interior.

Casablanca Abril 2014
Escrito desde la cara oculta de la luna


3 comentarios:

  1. Impresionantes relatos desde la cara oculta de la luna. Me dejas sin palabras.

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  2. Seguimos creciendo, seguimos caminando, cayendo y levantando y eso es lo importante ser capaz de aceptarnos e iluminar nuestras vidas y nuestros actos.

    Un abrazo.

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  3. Que capacidad eres unico,me gusta....

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